El caso de los ERE fraudulentos en la Junta de Andalucía va a traer cola. Es un caso tan enorme de corrupción y trapicheo que provoca conmoción a quien se informa sobre los aspectos que abarca. Ya hay detenidos un montón de personas que, supongo, darán debida cuenta de su delito... aunque visto lo del caso Ballena Blanca, no me creo ya nada.
Los sindicatos UGT y CCOO están hasta las cejas en esto... y ellos, los que han trapicheao, serán los que contribuyan a darle peor color a su trabajo, ése que ya muchos nos cuestionamos, con respecto a la necesidad de seguir liberándose para mantener la lucha social...
Creo que los cargos de la Junta de Andalucía que deben facilitar la investigación a la jueza, deberían hacerlo sin dudas, sin ambages, sin excusas... dejar que de verdad la Justicia depure responsabilidades.
Dicen ser honestos, ¿no? pues que lo parezcan...
Los que miramos desde fuera nos hacemos muchas preguntas que cuestionan bastante esa honestidad que tanto hacen volar en nuestro rostro cual bandera o trapo, impidiendo que podamos ver nada más. Se queda en palabras... huecas.
Eso sí, que el PP no exija tanto y facilite la investigación que otros hacen en su propia casa... que aquí pocos pueden presumir de tener el «pisito limpio». ¡Qué asco de política!
Muchas preguntas, muchas dudas. ¡Y luego se asombran de que las personas de bien estén descreídas de la política! ¡Si es que algunos llegan a dar un asco...!
Y, por ahora, nada más.